Pricum Prieto Picudo

Suave pero con cuerpo

Es el perfecto maridaje para cualquier comida. A pesar de su condición de tinto, no protagoniza todo el paladar, sino que deja sitio para aquello a lo que acompaña. Y en cuanto a su carácter de prieto picudo, que en mi opinión, suele alcanzar su mejor sabor en los claretes, consigue el matiz de la uva sin hacerte desear que fuera rosado. Asimismo, tiene cuerpo, es consistente pero no demasiado intenso. Perfecto.

Añada 2008

De acidez media, es poseedor de una clara astringencia, aunque a la vez tiene un paso por boca cremoso, muy lácteo aportando ligeras notas de violetas y frambuesas. En retrogusto se muestra muy mineral, tierra húmeda y algo de tinta china así como cueros. Los taninos siguen ahí, se empeñan en no irse. La madera apenas perceptible, curioso teniendo 13 meses de barrica. De persistencia media y áspera.

Magnífico

Me encanta la uva, el vino es una auténtica maravilla, riquísimo, totalmente recomendable